Por todos es sabido que cada día es más necesaria nuestra presencia en el mundo digital y redes sociales, sobre todo tras la crisis que estamos pasando. Quien te escribe estas palabras, yo mismo, estoy presente en al menos cuatro redes sociales, y cada una de ellas requiere una atención concreta. Además de tener varias web para gestionar, todas ellas del ámbito profesional, como es el caso de en la que te encuentras. Esto conlleva a que expongamos nuestra vida al público. Por ello es importante medir la información que se muestra, cobre todo el qué y el cómo se hace. No olvidemos que nosotros somos el primer filtro de lo que queremos que los demás vean de nosotros.
En este artículo te comentamos 5 pasos en una estrategia de marketing para médicos y profesionales médicos. El resultado es la generación de un contenido que debe perseguir la fiabilidad y la confianza del paciente. Quizás podamos encontrar recelos a compartir la experiencia que hemos acumulado durante años, si se hace o no es una decisión de cada profesional.
Debemos tener en cuenta que el paciente busca referencias digitales sobre el médico al que va a acudir, es decir, opiniones. Yo mismo recurrí a Google la semana pasada buscando información sobre médicos especialistas en un sector. Esta referencias debemos cuidarlas y hasta donde nos sea posible controlar qué dicen de nosotros.
¡Ojo! No hablo de censurar las malas opiniones, porque eso puede ser más contraproducente aún. Es habitual que me lleguen clientes solicitando que consiga una retirada de una mala reseña que alguien ha dejado. Incluso en ocasiones tras hacer un breve análisis todo apunta a ser una reseña falsa. Incluso ante esto podemos sacarle provecho, y en ningún momento hemos borrado o censurado ningún tipo de comentario.
Estrategia personalizada de Branding para Médicos
Debemos empezar por establecer una estrategia de marca (branding) para nosotros, adaptadas. ¿Con esto qué queremos decir? Pues que debemos optimizar nuestros recursos, ya sea el tiempo que empleemos o el presupuesto que invirtamos en terceros.
Parte de esta estrategia pasa por evaluar en qué redes sociales deberíamos estar. Para ello es necesario conocer cual es el perfil de nuestros pacientes, y en qué red social están. Una red social que debe ser un must como dicen los ingleses (must=obligación) es LinkedIn. Es una red social para profesionales donde puedes intercambiar o ampliar conocimientos además de relaciones. Seguramente es una red desde la que llegaran muy pocos o ningún cliente, pero aporta un respaldo de conocimiento y sabiduría como ninguna otra red social.
El vídeo es uno de los formatos más a tener en cuenta en nuestra estrategia ya que es uno de los formatos más consumidos en la actualidad.
Contenidos médicos especializados y adaptados
El contenido que debemos aportar debe responder a las inquietudes de quien nos dirigimos. Dos ejemplos: podemos tener un perfil de red social maravilloso pero demasiado especializado y no llegue a nuestros pacientes. O por el contrario podemos tener una web, sea blog o no, excesivamente divulgativa y no aportar al paciente debido a su falta de conocimientos en la especialidad.
Marketing en nuestra clínica médica
En este caso cuando hablamos de marketing nos referimos a las atenciones que recibe nuestro paciente desde que decide venir a nuestras instalaciones. Pongamos un ejemplo de la ruta de nuestro paciente al realizar una visita.
Si disponemos de parking para los pacientes debemos informarlo. Es habitual que el paciente se desplace en su propio vehículo y saber que puede aparcarlo con facilidad en o cerca de nuestra clínica será un punto a favor. En ocasiones esto no es posible, pero sí facilitarle información sobre un parking cercano donde dejar el coche, si lo hubiera.
Atender el timbre. Si el acceso a nuestras instalaciones requiere de un permiso, es decir que accionemos el portero automático o abramos una puerta, esto debe llevar poco tiempo. No es recomendable que nuestro paciente esté esperando fuera para entrar, bien sea por calor, frío o cualquier otra circunstancia.
Una vez dentro, será muy grato atenderlo con una sonrisa, y gestionar los tiempos hasta que acceda a consulta. Podemos ofrecerle agua, por ejemplo.
En consulta debemos animarle a expresar cómo se siente, para ayudarle en lo que podamos, y a comunicar sus dudas e inquietudes, para resolverla en la medida oportuna.
A la salida es importante que evaluemos cómo le ha ido la visita y que se quede con la fecha para la próxima cita, o una tarjeta de visita para cuando requiera de nuestros servicios.
Email de seguimiento
Es importante estar presente en el momento que el paciente requiera de nuestros servicios. Una buena manera puede ser el envío de mails de seguimiento, tanto relativos al tratamiento como con información extra. Esto puede ser un arma de doble filo, que hay que manejar con precaución para no caer en el spam.
Colaboraciones con otros profesionales
Un buena presencia y relación con otros profesionales, sean de nuestra especialidad o no, nos permite ampliar y consolidar nuestra imagen. Estas colaboraciones pueden consistir en un variedad de opciones: desde artículos divulgativos como autor invitado en otros blogs, artículos científicos, interacción con comunidades digitales…
Si te parece útil el artículo compártelo. Y si quieres más información puedes contactar con nosotros. ¡Que pases un feliz día!